Memoria Descriptiva

En el entorno suburbano de Mérida, Yucatán, surgen las oficinas Capro, con una construcción de 384.11m2 sobre un terreno de forma irregular. En este proyecto se toma la decisión audaz de conservar y redefinir la fachada histórica preexistente, demostrando cómo el diseño arquitectónico puede honrar la historia mientras abraza la innovación.

El diagrama de las oficinas se basa en una configuración lineal que se compone de dos bloques de tres niveles cada uno, separados por un patio central que conecta los distintos niveles a través de una distintiva escalera. Esta disposición no solo garantiza una distribución funcional de los espacios, sino que también maximiza la entrada de luz natural y las vistas panorámicas desde todas las áreas de trabajo.

El primer bloque alberga el espacio público de recepción y sala de juntas en su planta baja. En los niveles superiores de este bloque, se encuentran las dos oficinas privadas. Esta disposición estratégica asegura la privacidad en tareas sensibles, al igual que permite una conexión visual con el entorno circundante.

El segundo bloque se enfoca en la funcionalidad. La planta baja alberga otra sala de juntas y áreas de servicio. A medida que se asciende por los niveles superiores se despliega un entorno de trabajo que incluye espacios abiertos, terrazas y comedores, creando un edificio que promueve la creatividad y el bienestar entre colaboradores.

La paleta de materiales refleja la importancia por la atemporalidad. La madera y vegetación evocan conexión con la tradición, mientras que el concreto aparente y acero reflejan la estética contemporánea. El uso del color negro, agrega un toque de sofisticación y cohesión visual.

Las oficinas Capro en Mérida, Yucatán, son mucho más que un lugar de trabajo. Son un testimonio de cómo la arquitectura puede tejer historia y modernidad en una sinfonía visual y espacial.