Memoria descriptiva

Casa “O”, situada en el centro histórico de la ciudad de Mérida, en un terreno de forma irregular y un árbol de guaya como único elemento existente previo al proyecto.

El concepto parte del diálogo entre la cosmovisión maya y la cultura española, dando lugar a una interacción de significados y simbolismos que han impregnado la identidad de la arquitectura de la región.

El proyecto se desarrolla en torno a un eje rector, Sakbej (camino blanco en maya), que conecta el acceso con el árbol de guaya, enmarcando el último como un remate tangible; contenido entre la diagonal del muro existente y un nuevo muro convergente, reforzando así la intención. El árbol, representando la naturaleza como elemento vital, está rodeado por un cuerpo de agua circular, evocando la mística de los cenotes sagrados mayas; generando un nodo que pausa, articula y distribuye.

Los volúmenes emergen como esculturas monocromáticas, con una materialidad que evoca la mezcla del sascab (sahkab – tierra blanca) con kankab (k’ankab – tierra roja), sustratos propios de la zona; creando sombras dinámicas y gestando en su interior un ambiente silencioso, íntimo y cálido que se desvanece a través de la luz. Los techos a doble altura, el dominio del macizo sobre los vanos y una fachada cerrada que se alinea con el paramento, haciendo referencia a los elementos de las casas coloniales.

Con un esquema que obedece a la morfología del terreno y el programa arquitectónico basado en las necesidades y actividades del usuario, los elementos se emplazan jerárquicamente en relación con el nodo, creando un conjunto entrelazado por vacíos; aprovechando las mejores orientaciones y visuales, generando recorridos pausados por la vegetación que transitan entre la penumbra y la luz, difuminando los umbrales entre el interior y el exterior.