Memoria Descriptiva

Basado en los Objetivos de Desarrollo Sostenible, el Gobierno de la Ciudad de México promovió la reconversión de predios baldíos en espacios públicos seguros e incluyentes para el uso y beneficio de comunidades poco favorecidas. Ubicado en Coyoacán, este proyecto se llevó a cabo en dos etapas, entre 2019 y 2022, esta última etapa acoge actividades contemplativas y de encuentro social, con el fin de fomentar la cohesión entre los vecinos de la zona, así como promover su relación con el entorno.

El objetivo del proyecto fue reconciliar la ciudad con la naturaleza, para lograrlo se consideró obtener en sus espacios los máximos servicios ambientales y sociales a través de la gestión ecológica, social, económica y estética del lugar. Esto se logró confiando en los procesos naturales y en la importancia de generar ecosistemas urbanos saludables con el fin de proteger las comunidades, optimizando y reutilizando infraestructuras urbanas para incrementar la oferta de servicios ecosistémicos de regulación ecológica y cultural, para actuar con urgencia ante un escenario de variabilidad climática.

El proyecto plantea un tejido de senderos que al entre cruzarse generan espacios de actividades diversas como un recolector de agua lluvia, áreas verdes, actividades techadas, albercas de arena, miradores y un edificio educativo. La comunidad ejerce con entusiasmo actos sutiles como quitarse los zapatos para sentir los materiales y luego jugar espontáneamente en familia y amigos, también para rehabilitaciones y terapias de personas con discapacidades o de la tercera edad.

Lo esencial no es solo la existencia del parque, sino la forma en que las personas se relacionan con el espacio y hacen uso de él, un paisaje urbano que se convierte en un lugar inclusivo y accesible para una comunidad que por años estuvo al margen de proyectos de espacio público en la ciudad.