Madelina surge de la necesidad de crear un expendio de panadería y pastelería con lugar para deleitar los productos elaborados por la chef propietaria, dentro de un espacio agradable y armonioso que genere una experiencia cómoda y placentera.

Situado en la colonia Chapalita, una de las colonias con mayor protección patrimonial de Guadalajara debido a su naturaleza funcionalista, el proyecto rescata la identidad arquitectónica de la zona por medio de volúmenes claros, definidos y sobrios, insertando detalles de herrería que aluden a los diseños art-decó que existen en construcciones protegidas de la zona.

El proyecto está configurado por el expendio de pan, área de comensales, cocina, y servicios sanitarios ubicados en planta baja.  En planta alta encontramos el área de administración y comedor para personal, y en el sótano se encuentra un estacionamiento con capacidad para 14 autos.

La cocina se despliega paralela al restaurant, desarrollándose de forma lineal; primeramente, encontramos la zona de acceso de mercancía e ingreso de personal, posteriormente la zona de fríos y decoración; detrás, la zona de panadería-horneado y finalmente la zona de cocina caliente y bodegas.

La espiga de trigo formó el hilo conductor y de inspiración del diseño, representada de manera abstracta tanto en la herrería, como en lambrines de madera, azulejos, espejos, puertas y lámparas; dando unidad e identidad al lugar.

El acceso al recinto es denotado por un vestíbulo a doble altura donde apreciamos un candil inspirado en espigas de trigo.  Ingresando al lugar, el expendio de pan nos recibe por medio de tres mesas de exhibición; la mesa principal nos deleita con pan artesanal de masa madre y creaciones de autor; mientras que las otras dos mesas contienen pan tradicional mexicano y pan de otras latitudes.

La Pandemia de COVID nos obligó a repensar la manera de exhibir el pan de una manera segura para el consumidor, resultando en mesas con módulos individuales de exhibición y volúmenes cuadrados que, a manera de caja con iluminación, sirven para mostrar productos envasados. Estos módulos son intercambiables, dando a la exhibición dinamismo y versatilidad.

Frente al expendio encontramos la barra de café y caja, la cual controla desde su posición, el acceso al área de comensales y la entrada y salida del sitio.  El diseño del espacio está pensado en poder operar el expendio de pan sin necesidad de tener el restaurant en funciones.

El área de comensales es definida por tres zonas, la primera a la que llamamos “la cesta” que alude a una cesta de pan tradicional mexicano, en donde el tejido de este objeto de uso común, nos dio la pauta para formar la celosía que envuelve del espacio, el cual tiene una capacidad para 20 comensales y es delimitada por secciones de muro verde natural entre las que apreciamos un mural inspirado en un trigal.

La segunda zona se encuentra frente a “la cesta” y es denotada por un lambrín de madera en forma de L invertida, dando escala y cobijo al comensal mientras que refuerza la inspiración del diseño por medio de líneas inclinadas dibujando la abstracción de la silueta de la espiga de trigo. Esta zona tiene capacidad para 48 comensales y forma el cuerpo principal del restaurant.

La tercera zona es una terraza-jardín; con capacidad para 20 personas ideal para disfrutar un buen café con pan al aire libre o para algún evento privado.  La separación entre la terraza jardín del resto del restaurant lo forman el volumen de espacios de servicio, que albergan los sanitarios, el cuarto de lactancia y el espacio lúdico para niños.

Los candiles inspirados en semillas de cereales, adornan el lugar; mientras que las maderas, los tonos menta y gris en muros, la vegetación natural, y las formas abstractas nos sumergen en una ambientación cálida y serena, donde la experiencia del usuario es de relajación y comodidad.