El parque Cuitláhuac construido en 2019 en la alcaldía de Iztapalapa destaca por ser el segundo parque más grande de la Ciudad, así como por el valor que aporta a la población del oriente de la ciudad, conocida por un menor desarrollo de infraestructura, por lo que es definido como un proyecto regenerativo integral. El diseño de los espacios promueve la expresión artística y cultural, invita, reta a la realidad y al espectador. Busca promover la reflexión sobre un futuro esperanzador con oportunidades.

El parque y sus estructuras fueron desplantadas sobre el ex tiradero de basura Santa Cruz Meyehualco, esto fue posible por la combinación de materiales que fueron revalorizados y transformados en elementos constructivos que permitieron la estabilización y construcción de grandes superficies. La utilización de materiales reciclados conforman el 75% del proyecto. Sobre las superficies rellenas de basura se desplantaron plataformas para erigir todo el programa de infraestructura del parque, se emplearon gravas provenientes de la trituración de material de demolición con diferentes granulometrías y estabilizadas con una malla de plástico reciclado al centro que genera capacidad de carga a un suelo de basura que no la tenía. Los elementos construidos del parque fueron creados de la recuperación de materiales residuales dentro de un paradigma de economía lineal. Parque Cuitláhuac es un proyecto piloto de gran escala para la entrada a un modelo de economía circular en la Ciudad de México.

Se pretende que el parque se convierta en un bosque, “El Chapultepec del oriente”, sin embargo, este proceso ha sido largo y complejo ya que se realizaron múltiples estudios para determinar procedimientos de sembrado en “la basura” y que las especies se establecieran, hasta el momento se logró que el 90% de lo sembrado prevalezca. La forestación fue prioritaria para esta primera etapa, sembrando 114,726 especímenes entre árboles, arbustivas, herbáceas, cubre suelos , tules y 21,403 m2 de césped, en este proceso se tiene un porcentaje de establecimiento superior al 90%, utilizando tecnología de punta relacionada con la utilización de sustratos que inhiben la formación de patógenos y hongos. Gracias a estas acciones se ha suprimido el polvo, existe una mejora en el microclima a través de controles bioclimáticos, se logró la captura de grandes cantidades de CO2 incrementando exponencialmente la producción de oxígeno.

Se construyó un humedal que utiliza diversos procesos biológicos para tratar aguas negras y convertirlas en agua para riego cumpliendo con la norma 03 de la CONAGUA, permitiendo crear un ecosistema donde las plantas transforman el agua generando oxígeno y creando un paisaje inimaginable para los habitantes de la zona, en contraste al paisaje desolador que emitía gran cantidad de gases a la atmósfera. Gracias al agua para riego se logró consolidar el proceso de forestación lo que permitirá que a futuro se tenga un bosque consolidado con árboles de talla mediana y grande.

El área de skate park, es la segunda más grande del mundo, es un espacio emblemático e icónico cargado de simbolismos y cultura, Quetzalcóatl, Coatlicue y Tláloc solicitan el esfuerzo y sacrificio de los patinadores. El espacio pretende ser un lugar de clase mundial donde una gran cantidad de jóvenes podrán desarrollar grandes habilidades, mejorando enormemente su calidad de vida. La plaza nodal nos invita a disfrutar de espacios lúdicos, utilizando materiales donde se optimizaron los recursos sin dejar atrás el diseño de vanguardia.

En resumen, la calidad y originalidad de los espacios crean una imagen urbana que proyecta funcionalidad, vanguardia y respeto hacia el entorno social y ambiental.