Memoria Descriptiva

Ubicada al norte de la ciudad de Mérida, se construye sobre un terreno de 951m2 una vivienda unifamiliar de 740m2 distribuida en dos plantas, logrando la fusión entre la modernidad y elementos tradicionales yucatecos.

El génesis del proyecto se da a partir de la compactación del programa arquitectónico y así el vacío circundante a este, se convierte en una terraza abierta y otra cerrada que permite el aprovechamiento de la iluminación y ventilación natural, otorgándole un toque de frescura a los espacios de la casa.

El color blanco, permite destacar los elementos que rinden homenaje a los materiales tradicionales de la región tales como la piedra rajuela que hace alusión a los basamentos prehispánicos mayas, la madera y el juego de luz y sombra que ocurre en el núcleo de las escaleras.

En la planta baja se confluyen todas las áreas sociales, teniendo como vistas a estos patios antes mencionados. En la planta alta, se encuentran las recámaras, ofreciendo un espacio íntimo y tranquilo. La volumetría de la casa se adapta con gracia a la orientación del terreno, creando una residencia que armoniza con su entorno y se convierte en un hogar que celebra la rica herencia arquitectónica de Mérida.

Las fachadas están diseñadas con base a la orientación, teniendo así diversos elementos en cada una de ellas para proteger y brindar a los espacios un confort térmico favorable, creando un ambiente acogedor